Es importante definir una disciplina de oración diaria |
“Sin
duda esta carta le resultará extraña, pero le ruego tome en cuenta mi inquietud:
Soy un líder cristiano a cargo de los caballeros en nuestra congregación.
Trabajo durante el día y, generalmente, con mi esposa todas las noches pasamos
una hora en el templo. Nos gusta servir a Dios. No es una carga, es un placer
hacerlo. Mi problema es que llego tan cansado, que no tengo tiempo parar orar.
Incluso, al comenzar el día, estoy tan rendido, que a duras penas me despierto
y al mirar la hora, ya es tiempo de ir a la ducha, desayunar y al trabajo de
nuevo…”
R.L.P.,
desde Dallas, Texas, en EE.UU.
Respuesta:
¿Cuál es el paso más
importante de un hombre o una mujer comprometidos con el Reino de Dios? Su vida
devocional diaria. Es uno de los procesos más complejos porque quizá nos gusta
leer las Escrituras, ver buenos vídeos cristianos, asistir a la congregación,
pero reconozcámoslo: a muchos se nos dificulta la oración.